Gabriela Galante fue víctima de un hecho de robo en su vivienda en zona rural de nuestra ciudad: el domingo a la tarde mi hija va para el campo y se da cuenta que está la puerta abierta de un quincho donde nosotros trabajamos. Entra y nota que falta el televisor y todos revuelto los cajones. Era lo único que faltaba importante porque otra cosa no tenemos de valor. Pero me dice que no hay luz y cuando quisimos ver qué pasaba nos dimos cuenta que faltaban todos los cables que lleva la luz al lugar desde un galpón" relató.
Los ladrones robaron 100 metros de cables y por lo que pudieron constatar no han podido terminar el trabajo porque encontraron zonas donde quisieron sacar cables subterráneos.
"Son cables que están en el corazón del establecimiento y no se ven a simple vista. Ahora hay sembrado maíz y el maizal le sirvió para realizar el hecho" manifestó la danmificada.
Ahora están con miedo a que los ladrones vuelvan a ir ya que dejaron el trabajo sin terminar: "tendremos que tomar las medidas de seguridad del caso y tendremos que recurrir a pasar todos los cables subterraneos porque los aéreos les queda muy cómodo sacarlo" comentó.